¿CÓMO REVELA LA TORÁ
A DIOS?
En Isaías 61:1; Isaías 48:16; Ageo 2:5; Zacarías 4:6 vemos que la Torá declara claramente que Dios tiene un espíritu
En Isaías 6:1‑3,5 podemos ver aquí que el Señor tiene un trono y que, en su santidad, las personas tiemblan y se consideran indignas de estar en Su presencia, a menos que sean limpiadas y redimidas de sus pecados.
En Éxodo 24:9,10 vemos aquí que Dios tiene una forma y que tiene pies, lo que significa que tiene piernas.
En Génesis 18:1,2,17,22,25; Números 12:6‑8 entendemos por estos versículos que el Señor se reveló a Abraham en forma humana, le habló y escuchó su súplica para salvar a su sobrino Lot.
Asimismo, hablaba con Moisés cara a cara, de amigo a amigo, en forma humana.
En conclusión, la Torá revela que Dios tiene un espíritu, trono, piernas y puede ser visto en forma de hombre.